lunes, noviembre 06, 2006

Paella y Bonfire

Pues sabreis que estuve por Bcn, y la aventura más emocionante que tuve fue con carlitos, que tuvo el detalle de olvidarse de poner gasolina a la moto. La verdad es fue divertido, en medio de la autopista la supermoto empezó a hacer cosas raras y cada vez íbamos más lentos, al rato Carlos se desvia a una salida lateral y para la moto. "Lo siento, nos hemos quedado sin gasolina..." Qué!? Es una broma, no?. Pues no. La suerte fue que en el lado contrario de la autopista había una gasolinera y medio empujando la moto llegamos allí. Qué aventuras Carlitos!

Luego en plaza Catalunya tuve un bonito cruce de palabras con una pija tontaina que acabó recibiendo un sincero "gilipollas".

Cenitas con amigos y alguna fistecilla nocturna. Puche menuda casa que tienes y qué bien cocinas (el café estaba buenísimo) y esa tele hay que amortizarla.

Una vez aquí hice una cena para Sophie y otra para el equipo español (Pepe, Aga e Iván), bastantes divertidas ambas. Con Pepe & Co. jugamos a las historia inverosímiles que bautizamos como "Aguambabulula", consisten en escribir lo que a uno le parezca en dos líneas dejando la última palabra en la tercera línea para que la siga el siguiente, el cual no sabe qué se ha escrito anteriormente, y así sucesivamente hasta que se acaba el papel. Los resultados son los que son...

Noche del sábado, fiesta del Bonfire. En tal celebración lo que se hace básicamente es tirar fuegos artificiales, cada unno en su casa, por lo que visto desde lejos es muy bonito, está todo el cielo de Londres repleto de fuegos, pero de más cerca da yu-yu, razones: los fugos artificiales son peligrosos, cada casita-familia tira los suyos, no se toma ninguna medida preventiva ni de seguridad (recordemos que las casas en su mayoría está hechas de madera en su interior), las personas encargadas de hacer los fuegos son personas como tú y como yo, sin ninguna preparación a tal ejeción, la mayoría de los ingleses son unos descerebrados y unos borrachos. Bonita fiesta, de lejos. Para mi fue una experiencia de inmersión cultural, fui a casa de Jo, una amiga de Berta, que había invitado también a su hermana y marido con sus 5 hijos y novio de la hija mayor, los abuelos, la hija de Jo, y una familia india con tres niños más. Con tanto repertorio te da tiempo de ver cómo son las relaciones familiares en una familia estándard inglesa, y en agreement con Berta la conclusión es que los ingleses estan mal y son unos preprimidos, pero molan un rato. La comida muy rica y abundante.

Ayer de visita con Berta a South-End (S'End), un lugar de playa (en el delta del Thames) de lo más cutre que te puedas hechar a la cara: salones recreativos y máquinas tragaperras por doquier, carteles luminosos, fast food y take away restaurants, y hasta un mini parque de atracciones al lado del mar. La inlgaterra profunda en su auge.

1 comentario:

Anónimo dijo...

jejeje... soy un desastre :-p

Pero a ver quién te iba a dejar tirada con una moto en Londres, en la tierra esa en que no parará de llover, eh? Aquí estoy yo para caotizar tu vida (llame al 666 69 69 69, coste de la llamada 20€ + la voluntad).

p.d. Teníais que ver la cara de Alba de "No puede ser, batracio"... ;-)

Besos guapa y gracias por quedar